José María Olazábal, figura indiscutible del golf español, europeo y mundial, ha impulsado la I Copa José María Olazábal – Campeonato Interclubs Internacional Invitacional Sub-18, que se ha celebrado los días 2 y 3 de agosto en el Real Golf Club de San Sebastián (Jaizkibel). Y siendo el Club de Golf Barcelona un campo diseñado por él mismo, ha sido todo un honor poder participar en su evento.
Como premio añadido, a lo largo de estos días los jóvenes golfistas han disfrutado de la presencia del golfista vasco, recién nombrado Vice Capitán del equipo europeo de la Ryder Cup 2023.
En la primera jornada se disputaban los fourballs y foursomes, mientras que la segunda, que estaba reservada para las rondas individuales, se tuvo que suspender debido a las fuertes lluvias. Así es que la clasificación parcial compuso el podio final con el Real Club de Golf El Prat como campeón, con 139 golpes; siendo segundo del Club de Golf Escorpión, con 143 golpes; y tercero el Club de Golf Barcelona, con 144 golpes.
La expedición del Club de Golf Barcelona, que estaba compuesta por Daniela Campillo, Jan Farré, Ignacio Berea y Daniela Bellido, con Juan Carlos Campillo como capitán, llegó a San Sebastián el martes a medio día, después de más de 5 horas en coche. Por la tarde en Jaizkibel, sin duda un lugar mágico, vuelta de prácticas con los chicos y chicas, muy animados y con ganas de hacerlo bien.
Seguidamente, en la reunión de capitanes ya se informó del plan de evacuación de cara al domingo, dada la previsión meteorológica anunciando intensas lluvias. Y a continuación tenía lugar la acogida del torneo, con la presentación de todos los equipos recibidos por el propio José María Olazábal. La verdad es que estuvo mucho cercano, y los jóvenes promesas del golf español quedaron encantados.
Con la participación de 19 equipos, 16 españoles y 3 procedentes del sur de Francia, el miércoles se iniciaba la competición en la modalidad parejas, haciendo el foursome con Daniela Campillo y Jan Farré, y el fourball con Daniela Bellido e Ignacio Berea.
Saliendo temprano, de los primeros grupos, por el tee del 10, nuestros jugadores le pegaron muy bien a la bola, pero sin demasiada suerte, pues varios muy buenos golpes terminaron saliéndose de green por el backspin, demostrando la complejidad de un campo que requiere conocer algunos ‘truquillos’ con antelación.
Daniela C. y Jan empezaron con bogey en su primer hoyo (el 10), después de ver como su bola se salía de green por el efecto de retroceso y rodando calle abajo. Una de las características de este campo es que las calles y son muy movidas, y con mucho desnivel, al igual que los greens, elevados muchos de ellos. Les pasó lo mismo en el segundo y tercer hoyo, aunque pudieron recuperarse haciendo ‘up & down’. En el cuarto hoyo llegó la primera oportunidad de birdie, no convertida, y en el quinto llegó un doloroso doble bogey.
Mientras, Ignacio y Daniela B. estaban jugando sólidos, llevando el control de su vuelta. A Daniela C. y Jan se les escapaba otra gran oportunidad de birdie en su sexto hoyo (el 16), frustrado por una corbata, acabando los primeros nueve en +3.
Arrancaron la segunda vuelta con un gran birdie en el hoyo 1 de Jaizkibel, tras una gran madera 5 de Daniela C. y un gran approach con el wedge de 54º de Jan, dejándola prácticamente dada.
Por su lado, el partido a mejor bola seguía jugando sólido y alternando buenos golpes, con algún error puntual, pero manteniéndose al par en el día. La pareja del foursome sufría otro bogey, pero con un gran birdie en su hoyo 18 (el 9) recuperaban el +3, un buen resultado que, con todo, no les dejaba satisfechos.
Rápidamente se fueron a buscar a Daniela B. e Ignacio para animarles en su final de vuelta. Y acabando con grandes birdies en los hoyos siete y nueve, firmaban un magnífico -1, inyectando una sonrisa en todo el equipo.
El Club de Golf Barcelona se situaba tercero, a un golpe del segundo, el CG Escorpión, y a cinco del líder, el RCG El Prat, por lo que en los individuales del domingo podría pasar cualquier cosa. Sin duda, todo el equipo tenía ganas y esperanzas de darle la vuelta al resultado.
La jornada terminó con una cena en el club, de nuevo con la asistencia de Olazábal, quien se acercó a la mesa y deseó suerte a los chicos y chicas de cara a la jornada final de individuales.
Sin embargo, estuvo lloviendo toda la noche, dejando los greens de Jaizkibel muy empapados. Pese a los intentos de la organización de jugar al menos nueve hoyos individuales, no fue posible, porque tampoco paró de llover en toda la mañana, tomándose la decisión de suspender la jornada y dar definitivamente por concluido el torneo antes del mediodía. Así pues, la clasificación se cerró con los resultados del primer día, acabando en un buen tercer puesto.
“Una lástima, porque nos quedamos con las ganas de dar guerra en los individuales. Acabar terceros está muy bien, pero pienso que fácilmente hubiéramos podido estar luchando por el segundo puesto, incluso acercarnos al primero”, se lamentaba Juan Carlos Campillo, capitán del equipo del Club de Golf Barcelona.
Mientras tanto, los participantes pasaron la mañana en el TopTracer del campo de prácticas de Jaizkibel, hasta la comida de la entrega de premios con la que se cerraba el evento.
Olazábal, siempre dispuesto a apoyar a la cantera del golf español, ha promovido esta competición con vocación de continuidad, con la intención de estar personalmente presente durante la celebración del torneo y compartir con todos los participantes y asistentes esta fiesta del golf.
¡Gracias por la acogida, el año que viene repetimos!
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